De la prensa de Almería:La mayoría de consultas sobre violencia de género corresponde a mujeres árabes.
Hay 49 plazas de recurso para maltratadas en pisos tutelados y casas de acogida.
El Instituto Andaluz de la Mujer en Almería recibió más de 2.190 consultas sobre violencia de género el año pasado, lo que supone un incremento de más del 70% respecto al año anterior. La mayoría de las interesadas fueron mujeres de origen árabe que fueron atendidas a través del Servicio de Traducción Simultánea que abarca hasta 51 idiomas.
El Instituto Andaluz de la Mujer cuenta en Almería con 49 plazas de recurso ante emergencias y para atender a las mujeres víctimas de violencia de género: 13 en centros de emergencia, 20 en casas de acogida y 16 en pisos tutelados.
Según manifestó la coordinadora provincial del Instituto Andaluz de la Mujer, Águeda Cayuela, durante el año pasado se contabilizaron hasta 30.000 consultas de mujeres que visitaron tanto el centro provincial como los 13 centros municipales, para asesoramiento laboral, violencia de género, publicidad no sexista o campañas de sensibilización, entre otras cuestiones.
Precisamente, el IAM hizo hincapié el año pasado en las campañas de sensibilización y coeducación dirigidas a la sociedad, sobre todo en los colegios para "incidir en la importancia de la igualdad efectiva entre hombres y mujeres en los más pequeños", según la coordinadora provincial, quien destacó la campaña del juguete no violento y no sexista bajo el eslogan La publicidad también juega.
También realizó actuaciones en la Universidad, donde desarrolló el programa Igualen con el objetivo de fomentar el empleo en las universitarias y tras recibir una formación completa permite acceder a un bloque de prácticas en el extranjero. "El año pasado diez jóvenes almerienses tuvieron la oportunidad de trabajar en prácticas en Francia e Inglaterra", destacó Águeda Cayuela.
El Servicio de Defensa Legal de la Mujer que el IAM desarrolla con la colaboración de UGT y CCOO atendió el año pasado 112 consultas cuya denuncia más habitual fueron los despidos improcedentes de mujeres, sobre todo de embarazadas que perdieron su puesto de trabajo nada más pedir la baja por maternidad, según avanzó Cayuela.
Hay 49 plazas de recurso para maltratadas en pisos tutelados y casas de acogida.
El Instituto Andaluz de la Mujer en Almería recibió más de 2.190 consultas sobre violencia de género el año pasado, lo que supone un incremento de más del 70% respecto al año anterior. La mayoría de las interesadas fueron mujeres de origen árabe que fueron atendidas a través del Servicio de Traducción Simultánea que abarca hasta 51 idiomas.
El Instituto Andaluz de la Mujer cuenta en Almería con 49 plazas de recurso ante emergencias y para atender a las mujeres víctimas de violencia de género: 13 en centros de emergencia, 20 en casas de acogida y 16 en pisos tutelados.
Según manifestó la coordinadora provincial del Instituto Andaluz de la Mujer, Águeda Cayuela, durante el año pasado se contabilizaron hasta 30.000 consultas de mujeres que visitaron tanto el centro provincial como los 13 centros municipales, para asesoramiento laboral, violencia de género, publicidad no sexista o campañas de sensibilización, entre otras cuestiones.
Precisamente, el IAM hizo hincapié el año pasado en las campañas de sensibilización y coeducación dirigidas a la sociedad, sobre todo en los colegios para "incidir en la importancia de la igualdad efectiva entre hombres y mujeres en los más pequeños", según la coordinadora provincial, quien destacó la campaña del juguete no violento y no sexista bajo el eslogan La publicidad también juega.
También realizó actuaciones en la Universidad, donde desarrolló el programa Igualen con el objetivo de fomentar el empleo en las universitarias y tras recibir una formación completa permite acceder a un bloque de prácticas en el extranjero. "El año pasado diez jóvenes almerienses tuvieron la oportunidad de trabajar en prácticas en Francia e Inglaterra", destacó Águeda Cayuela.
El Servicio de Defensa Legal de la Mujer que el IAM desarrolla con la colaboración de UGT y CCOO atendió el año pasado 112 consultas cuya denuncia más habitual fueron los despidos improcedentes de mujeres, sobre todo de embarazadas que perdieron su puesto de trabajo nada más pedir la baja por maternidad, según avanzó Cayuela.
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Hasta aquí las noticias de la prensa de Almería.
Llaman dos cosas la atención:
1º Que sea la Coordinadora del Instituto de la Mujer, Águeda Cayuela (por cierto sin ningún parentesco con nuestro Secretario General) quien hable de que son las mujeres inmigrantes las que mayores aportan mayores índices de malos tratos por parte de sus parejas, también inmigrantes.
2º La corrección política al hablar de “árabes”, para referirse a los marroquíes musulmanes. Los marroquíes tienen de árabes lo que los senegaleses de hijos del imperio del sol naciente, es decir nada.
Pero es más correcto, dentro de los parámetros orwelianos, del discurso dominante, calificarlos de árabes y de paso obviar a la religión a la que pertenecen. Religión que, al igual que ocurre con el cristianismo, se divide en múltiples sectas, y si puede ser o no discutible que en las palabras del Sagrado Corán aparezca algo que indique que permita o no maltratar a una mujer, es más cierto que el maltrato no viene determinado por la religión, sino por la educación social que se ha recibido, y la secta a la que se pueda pertenecer. Pero claro, explicar eso, es como pedir peras al olmo, tanto para la coordinadora, como para los periodistas, por lo tanto es mejor, en aras del “buen rollito políticamente correcto”, cargarles a los árabes el sambenito de maltratadotes, en vez de a los marroquíes, así no se molestan los amigos de ZParo, aunque subyace el peligro que CODENAF, dirigida por el inefable Bentrika, autentico ordeñador de subvenciones pagadas con el dinero de los españoles, dé la voz de alarma y la acuse de racista, y hagan aumentar las estadísticas.
Mientras tanto, y como el Pisuerga pasa por Valladolid, el ex dirigente de ATIME, el marroquí Hanafi Amza, ha sido condenado a mas de dos años de cárcel por estafa, pero el asunto se silencia, “por el buen rollito” y la alianza de gilimamones”.
Llaman dos cosas la atención:
1º Que sea la Coordinadora del Instituto de la Mujer, Águeda Cayuela (por cierto sin ningún parentesco con nuestro Secretario General) quien hable de que son las mujeres inmigrantes las que mayores aportan mayores índices de malos tratos por parte de sus parejas, también inmigrantes.
2º La corrección política al hablar de “árabes”, para referirse a los marroquíes musulmanes. Los marroquíes tienen de árabes lo que los senegaleses de hijos del imperio del sol naciente, es decir nada.
Pero es más correcto, dentro de los parámetros orwelianos, del discurso dominante, calificarlos de árabes y de paso obviar a la religión a la que pertenecen. Religión que, al igual que ocurre con el cristianismo, se divide en múltiples sectas, y si puede ser o no discutible que en las palabras del Sagrado Corán aparezca algo que indique que permita o no maltratar a una mujer, es más cierto que el maltrato no viene determinado por la religión, sino por la educación social que se ha recibido, y la secta a la que se pueda pertenecer. Pero claro, explicar eso, es como pedir peras al olmo, tanto para la coordinadora, como para los periodistas, por lo tanto es mejor, en aras del “buen rollito políticamente correcto”, cargarles a los árabes el sambenito de maltratadotes, en vez de a los marroquíes, así no se molestan los amigos de ZParo, aunque subyace el peligro que CODENAF, dirigida por el inefable Bentrika, autentico ordeñador de subvenciones pagadas con el dinero de los españoles, dé la voz de alarma y la acuse de racista, y hagan aumentar las estadísticas.
Mientras tanto, y como el Pisuerga pasa por Valladolid, el ex dirigente de ATIME, el marroquí Hanafi Amza, ha sido condenado a mas de dos años de cárcel por estafa, pero el asunto se silencia, “por el buen rollito” y la alianza de gilimamones”.
Palabra de Honor.
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