lunes, 27 de abril de 2009

Aznar, ¿porqué no te callas?

Evidentemente cada vez que Aznar habla parece subir el pan, cuando no lo hace con una copa de vino en la mano, lo parece hacer sin riego sanguíneo.


La cantidad de sandeces y contradicciones es supina y por supuesto su vehemente sometimiento y admiración a Bush.


Y prácticamente pedía el despido libre y gratuito, para mayor gloria del capitalismo que es el provocante de la situación de crisis y además es el único que saldrá, ya lo esta siendo, beneficiado con inyecciones de dinero publico, paradojas de la vida, para entidades privadas, que luego niegan ese dinero a su legitimo propietario, el ciudadano.

Pero no es solo eso: en la época actual, y prácticamente desde siempre, la cuerda se rompe por el sitio más débil, esto es el trabajador. El trabajador es el que hace que funcione la empresa, es el que crea la riqueza, riqueza que luego es succionada, como hacen los vampiros, por el capital. La inmigración ha sido el arma utilizada para ello. A los españoles, y europeos en general, se les ha machado hasta el paroxismo que la inmigración era la panacea, que pagarían las pensiones, organismo internacionales dependientes del FMI, ONU, Banco Mundial, etc. Se han hartado de repetir que eran necesario millones de inmigrantes. De pronto parce que el pueblo se ha dado cuenta de que ha sido engañado como un niño. No solo los inmigrantes no aportaban nada, sino que solo valían para enriquecer a los explotadores, y para enriquecer a las oeneges, y para apretar las tuercas a las opiniones disonantes, puesto que se sacaron leyes criminalizando a quien osara alzar la voz contra la inmigración. Los principales artífices de esta persecución, aparte de los políticos de burdel que sufrimos y las oeneges ordeñadoras de subvenciones, han sido precisamente los capitalistas, de todo tipo y pelaje, desde el constructor salvaje que pagaba cuatro duros, que no ponía medidas de seguridad, que bajaba los sueldos por que los inmigrantes lo hacían mas barato que nadie, lo siguen haciendo, hasta los bancos que cobraban sus suculentas comisiones de las remesas de dinero que enviaban los inmigrantes, un dinero que se suponía era el que iba a pagar las pensiones, y por supuesto el silencio colaboracionista de los sindicatos , de todo tipo y pelaje también.

Hasta ahora nadie ha dicho, salvo Ernesto Ekaizer, que lo primero que hay que hacer es bajar los sueldos a los políticos y a los ejecutivos. Nadie quiere oír hablar de eso, faltaría más. Que se les baje el sueldo a los obreros pero no a políticos y ejecutivos, ellos han de mantener su tren de vida. En España siempre ha sido así. Como se suele decir “por cada indio 15 jefes y el indio trabajando para los 15”. Por eso lo bueno seria que Aznar renunciara a los sueldos oficiales que pueda tener, a los escoltas, al coche y demás prebendas y diera ejemplo, y como él cientos de políticos, ex políticos y miles de ejecutivos. Pero no, Aznar, el chico de los recados de Bush, propone bajar sueldos y despidos. Este antiguo miembro de la Falange, hijo del régimen franquista, debe haber olvidado pronto las enseñanzas nacionalsindicalistas y parece haber adoptado, de forma feroz, las ideas del neoliberalismo, y es que ya se sabe, los conversos son los peores.

Aznar, hazte un favor y háznoslo a los demás:

¡¡¡CÁLLATE!!!

No hay comentarios:

Publicar un comentario